Industria avícola: Volver a conectar con lo natural
¿Sabías que el 98% de los alimentos que consumes se elaboran a gran escala? Esto produce problemas de alto impacto en las comunidades, los animales y el ambiente. Por eso, en La Campestre tenemos un modelo opuesto al industrial, caracterizado por ser de bajo impacto y con eje central en el bienestar de los animales.
En La Campestre trabajamos con avicultores de la zona central, comprometidos con el ambiente y el bienestar animal, para así en conjunto poder implementar un sistema sustentable, amigable, sostenible y con el menor impacto posible tanto a nivel de medioambiente como hacia las comunidades.
Nuestro objetivo es desarrollar mejores procesos de producción, generando un triángulo virtuoso que consiga equilibrar la industria, ya que la producción a nivel industrial actualmente no siempre se preocupa de cumplir con principios ecológicos ni es respetuosa en múltiples factores con el entorno.
Este sistema híbrido, busca ser amigable con el animal y sus necesidades propias. Y estima imprescindible el cuidado del medio ambiente en su desarrollo.
En lo social, la intención es que los huevos producidos bajo nuestro alero sean realmente un aporte nutricional para las personas, pero también, que sean accesibles para la comunidad.
“Yo creo que los consumidores hoy en día y las tendencias, están relacionadas a producir y conocer el origen de los alimentos” explica Omar Abarca, médico veterinario y fundador de Huevos La Campestre.
Gracias a esta consciencia que se ha ido expandiendo, la propuesta ha tenido un gran impacto entre los actores involucrados en este tema, y en general, se proyecta una apertura para sumarse a formatos de producción más modernos y actualizados.
Creemos que es urgente volver a conectarnos con lo natural y trabajar en modelos de desarrollo armónicos, que permitan proteger y restaurar el equilibrio, porque somos la esperanza para que futuras generaciones puedan conocer y disfrutar lo que un planeta sano nos ofrece.
En La Campestre trabajamos con avicultores de la zona central, comprometidos con el ambiente y el bienestar animal, para así en conjunto poder implementar un sistema sustentable, amigable, sostenible y con el menor impacto posible tanto a nivel de medioambiente como hacia las comunidades.
Nuestro objetivo es desarrollar mejores procesos de producción, generando un triángulo virtuoso que consiga equilibrar la industria, ya que la producción a nivel industrial actualmente no siempre se preocupa de cumplir con principios ecológicos ni es respetuosa en múltiples factores con el entorno.
Este sistema híbrido, busca ser amigable con el animal y sus necesidades propias. Y estima imprescindible el cuidado del medio ambiente en su desarrollo.
En lo social, la intención es que los huevos producidos bajo nuestro alero sean realmente un aporte nutricional para las personas, pero también, que sean accesibles para la comunidad.
“Yo creo que los consumidores hoy en día y las tendencias, están relacionadas a producir y conocer el origen de los alimentos” explica Omar Abarca, médico veterinario y fundador de Huevos La Campestre.
Gracias a esta consciencia que se ha ido expandiendo, la propuesta ha tenido un gran impacto entre los actores involucrados en este tema, y en general, se proyecta una apertura para sumarse a formatos de producción más modernos y actualizados.
Creemos que es urgente volver a conectarnos con lo natural y trabajar en modelos de desarrollo armónicos, que permitan proteger y restaurar el equilibrio, porque somos la esperanza para que futuras generaciones puedan conocer y disfrutar lo que un planeta sano nos ofrece.
